Mientras la compraventa de unidades terminadas es un negocio mas complejo de proyectar, este segmento de negocios (Inversiones desde el pozo) se posiciona como uno de los pocos que capta una oportunidad de adquirir rentabilidad de forma permanente.
El negocio inmobiliario tiene sus altas y bajas y en éste contexto adverso, derivó en una caída de los precios en dólares de las propiedades terminadas.
En este sentido, un informe de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), indica que ésta contracción “da cuenta del mal momento del mercado”. Se refiere a la compra venta de inmuebles terminados, no a la inversión de Pozo.
En este contexto, vale la pena repasar ¿Cual es las situación para un segmento del negocio inmobiliario? que siempre ha generado sumo interés en muchos argentinos: Si!, me refiero a los proyectos desde el pozo. Es decir, aquellos en los que los inversores particulares participan desde la gestación de la obra.
¿Mantienen su atractivo en cuanto a la rentabilidad que ofrecen?
Un inmobiliario reconocido opinó: : “La inversión en boca de pozo sigue manteniendo su solidez y ofreciendo una rentabilidad muy interesante. Es un negocio muy seguro, a diferencia de otros de mayor riesgo”.
Buen margen de ganancia para particulares
En general, las fuentes del sector consultadas coinciden en que si bien reconocen que el rendimiento es un poco menor comparado con el de hace unos años, es una inversion segura.
Antes del cepo cambiario, los particulares que se sumaban a un proyecto desde boca de pozo lograban una rentabilidad del orden del 25% al 30% en dólares, para un desarrollo a dos años. Con Ingeral® los números basicos eran de un 30% de rentabilidad en dolares y el termino de la obra era de 13/18 meses.
Hoy esos márgenes se han reducido, más allá de que se tenga que considerar a la moneda local como referencia. Igualmente ofrecen una sana alternativa.